Para
comenzar voy hacer una muy breve presentación acerca de mi relación con la
literatura.
La
literatura y yo no empezamos con buen pie que digamos, en la época del colegio y
el posterior instituto “odiaba” y temía, a partes iguales, el momento en que mi
profesora de Lengua Castellana y Literatura, decía que debíamos de leernos “ese
libro”. Normalmente eran libros que para nada captaban mi atención, y he de
reconocer que más de una vez evite la lectura, con un triste resumen sacado de
internet.
Pero
todo esto cambió a medida que fui creciendo, y sobre todo cuando era yo la que
decidía que libro debía leer.
Tristemente,
no soy la única a la que le ha sucedido esto, por lo que espero y deseo, que el
día de mañana sea una maestra que consiga transmitir a sus alumnos lo bella y
divertida que es la literatura, empezando como no, desde pequeños.
Cuando
vi el nombre de la asignatura, no me atrajo demasiado. Erróneamente tenia
ciertos “prejuicios” acerca de la asignatura, ya que la idea que tenía en mi
cabeza distaba mucho de la realidad. No se trataba de estudiar autores y más
autores sino de aprender a través de la creación de un propio blog. Por ello a pesar
de la incertidumbre y el desconocimiento, inicie la asignatura con muchas ganas e ilusión.
Las
creaciones literarias nunca han sido mi fuerte, siempre he tenido más facilidad
en el arte de dibujar que en el de escribir, por lo que el comienzo del blog me
costó algo más de lo normal.
A medida
que pasaban las semanas, me adentraba más en los bloques de la teoría, y gracias
a ella mis bases y mis conocimientos se fueron formando, con lo que las
publicaciones de mi blog me fueron resultando más amenas e interesantes.
Con
el bloque I aprendí
que la literatura infantil no tiene menos valor que la demás, la literatura
infantil, es literatura, solamente que va dirigida a un público diferente, a
los niños.
Diferenciar
entra la paraliteratura y la literatura es importante, para que un texto sea literario
debe pertenecer a uno de los tres géneros:
la narrativa, poesía o texto teatral, la función del lenguaje que predomina es
la poética, debe ser un texto de ficción aunque se base en hechos reales y su
objetivo siempre es artístico.
Estos dos últimos puntos son en los que la
literatura y la paraliteratura más se diferencian.
Es
en el siglo XX cuando nace la verdadera literatura infantil, con
psicólogos, maestros y escritores empeñados
en hacer del libro para niños una verdadera fuente de placer y entretenimiento
para los pequeños lectores.
Los
textos teatrales son el porcentaje
menor de la literatura infantil, ya que su lectura y comprensión suele ser más
complicada, a pesar de la suma de esta dificultad, como futuros maestros
debemos ser conscientes de la importancia del teatro como método de enseñanza y
aprendizaje, para trabajar el lenguaje, la comprensión, la expresión corporal,
la coordinación, el equilibrio… por lo que armados de paciencia, no debemos de
dejarnos desanimar por las posibles dificultades que surjan en el camino.
Aunque
la poesía está al alcance de los
niños, no es un instrumento que se utilice a menudo en las aulas. Presentando la
poesía a los niños como un juego conseguiremos que desarrollen su propia
imaginación.
No
hay nada que le guste más a un niño que un cuento,
hacerles partícipes de este hace que se favorezca la maduración psicológica del
niño: la interiorización del yo, la inserción social y el desarrollo lingüístico,
todo ello a través de la fantasía, las aventuras, las emociones, la inserción
social…
Para
que un cuento capte la atención de su público debe basarse en una buena
estructura, un lenguaje y unas ilustraciones adecuadas, que los niños se
identifiquen con los temas y los protagonistas…
Canciones,
cuentos maravillosos, retahílas, trabalenguas, fabulas… entran dentro de la
literatura infantil folclórica, correspondiente al bloque II. El anonimato, la transmisión oral y la multiplicidad son
características básicas de estos textos.
El
uso de teatro, poesía y cuentos folclóricos en el aula tiene grandes ventajas a
nivel psicológico y pedagógico, ya que estimulan la imaginación y la fantasía
del niño, la lógica, el lenguaje, desarrollo y madurez de su propia
personalidad, la trasmisión de valores…
La
importancia del cuento como instrumento de enseñanza y aprendizaje, recae en el
bloque III.
Es
esencial saber captar la atención de los niños para que este método de
transmisión de conocimientos sea útil, para ello la interactuación es
imprescindible, ya sea mediante preguntas de los niños durante la propia
lectura, o al final de la misma.
Existen
cuentos para ser narrados con el apoyo de las ilustraciones y otros para ser leídos.
Los
cuentos para ser narrados, a través de la narración con libro o los
cuentacuentos deben conocerse bien con anterioridad para trasmitirlos de manera
adecuada.
A
pesar de la amplísima oferta que hay en la actualidad, sobre textos de
literatura infantil, en muchas ocasiones no disponemos del ejemplar necesario o
el estado de este es bastante mejorable, por lo que un buen maestro debe de
conocer las armas necesarias para la realización y creación de cuentos propios
o con la ayuda de los niños, de estas estrategias habla el bloque IV.
El
dibujo, las secuencias, el binomio fantástico, la hipótesis absurda… son diferentes
estrategias de las que el maestro puede hacer uso para la creación en prosa o
teatro. Los tantanes, la letra absurda, los trabalenguas, los pareados, las
adivinanzas, encadenamientos… nos sirven a la hora de crear textos en verso.
Recopilar
los textos creados en forma de libro no debe resultar una tarea demasiado
ardua, basándonos en tres simples reglas: la resistencia,
una mínima inversión económica y poca dedicación temporal.
La
importancia de la literatura infantil queda evidenciada en los 4 bloques
anteriores, por lo que facilitar el acceso a esta dentro del aula, es también una
misión importante para el maestro. Para ello se utilizará un instrumento fundamental,
como es el rincón de lectura o biblioteca del aula, el bloque V nos muestra unas simples pautas para llevarlo a cabo de la
mejor manera posible.
Dotar
a nuestra aula con un espacio como este, nos ayuda a acercar a los niños a la
literatura de manera libre, lúdica y autónoma, a través de actividades libres o
motivadoras como un elemento más en la programación de tareas educativas.
Un
espacio amplio, agradable, estimulante y luminoso, de fácil acceso para todos los niños, en definitiva un
lugar mágico y espacial, donde los niños convivan con libros y aprendan a valorarlos,
cuidarlos y conservarlos.
A
modo de conclusión he de recalcar esta asignatura me ha sorprendido mucho y
bien, me ha mostrado y enseñado mucho más de lo que ingenuamente me esperaba.
No
solo me ha dotado de conocimientos acerca de la literatura infantil, sino que
me ha ayudado a descubrir los mecanismos y herramientas necesarias para que el
día de mañana capte la atención de mis alumnos, al narrarles un cuento, o una
bella poesía o una entusiasmarte obra de teatro, y así consiga que sientan una
verdadera pasión por la literatura infantil.
Estupendo artículo. Si añades bibliografía útil sobre la asignatura que te pueda servir en el futuro, estará aún mejor(busca en el último párrafo sobre el artículo en la guía de trabajo)
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